


En un entorno cada vez más competitivo y orientado al dato, contar con estrategias de medición en marketing digital eficaces es esencial para tomar decisiones acertadas.
El Marketing Mix Modelling (MMM), los modelos de atribución y los experimentos de incrementalidad forman parte fundamental de la estrategia de medición y nos ayudan a entender en profundidad el impacto de los esfuerzos de marketing.
Sin embargo, disponer de estas soluciones ya no es suficiente. El verdadero valor reside en saber cómo combinarlas estratégicamente según las necesidades específicas de cada organización.
Uno de nuestros objetivos en Transformance es adaptar el stack de martech al momento de la organización. Entendiendo, además, las necesidades que debe cubrir actualmente y preparándolo para el futuro.
Trabajando de la mano de nuestros clientes, hemos aprendido que la combinación de MMM, atribución y experimentos de incrementalidad permite a los equipos de marketing (tanto internos como externos) explotar las fortalezas de cada enfoque y mitigar sus debilidades.
Cada uno de estos métodos ofrece ventajas únicas. Por ejemplo:
Esta sinergia entre estrategias es ideal ya que mejora la precisión en la medición (y calidad del dato) y optimización de las inversiones en marketing. La clave está en integrar múltiples metodologías para obtener una visión holística y precisa del impacto real que está teniendo nuestros esfuerzos de marketing en los resultados y el negocio.
Gracias a nuestra experiencia integrando ecosistemas de medición avanzados, sabemos que el éxito no depende solo de la tecnología, sino también de la capacidad de convertir datos en decisiones accionables. Por eso, trabajamos con tres pilares fundamentales:
Es esencial dedicar un tiempo de calidad a definir objetivos claros, KPIs y métricas clave que permitan establecer metas específicas alineadas con los objetivos de negocio así como tener el control de la inversión que podemos realizar en cada canal.
Utilizar tecnologías y plataformas que permitan recopilar y analizar datos de manera efectiva teniendo en cuenta las regulaciones de privacidad y que permitan construir hipótesis basándose en los insights obtenidos.
La cultura de experimentación es clave en el marketing moderno. Implementar pruebas A/B, estudios de incrementalidad y ciclos de mejora continua permite adaptar estrategias basadas en análisis de marketing real y no en suposiciones.
En definitiva, al adoptar este enfoque integrar de las estrategias de medición, las organizaciones pueden navegar con mayor confianza en el panorama del marketing digital actual, tomando decisiones basadas en datos que impulsen el crecimiento sostenible y fortalezcan la posición competitiva en el mercado.